MICROHISTORIAS: El realismo mágico de Elena Garro

14/12/2014 - 12:00 am
Elena Garro y su hija Helena Paz Garro.
Elena Garro y su hija Helena Paz Garro.

Autora: Karla Motte

Elena Garro forjó una identidad polémica y contradictoria, con altibajos personales que construyeron una imagen pública generalmente obnubilada frente a la resplandeciente figura de su marido, Octavio Paz. Sin embargo la obra literaria de Garro, que en su momento no tuvo una amplia aceptación, ha sido estudiada con gran interés y revalorada por su elevado nivel como precursora del realismo mágico hispanoamericano.

Cuentan que de niña Elena Garro era hiperactiva, alegre y de fina sensibilidad, cualidades que logró desarrollar mediante la literatura. Nació en Puebla de los Ángeles en 1920, pero a temprana edad debió salir de su estado natal debido a los conflictos ocasionados por la guerra cristera. Este acontecimiento histórico, años después, sería el escenario de una de sus obras más trascendentes: Recuerdos del porvenir.

Amante de los gatos.
Amante de los gatos.

Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, lugar en donde conoció a Octavio Paz con quien contrajo matrimonio en 1937. Entre los vericuetos de la vida de ambos, la boda ha sido motivo de algunas especulaciones, pues ella aseguraba que Paz la había obligado a casarse con él siendo aún menor de edad. Aunque los detalles son difusos, la relación terminó con el divorcio en 1959.

Desarrolló una carrera muy prolija como escritora, periodista, guionista, dramaturga, cuentista, novelista y poeta; trabajó en periódicos en los que difundió sus ideas políticas y sociales, y se involucró en movimientos sociales de la época. Sin embargo, 1968 marcó un desafortunado parteaguas en su carrera y su vida pues ante la represión oficial hacia el movimiento estudiantil, en los medios se publicó una opinión suya donde afirmaba que los intelectuales de izquierda (refiriéndose a Luis Villoro, Emmanuel Carballo, Leopoldo Zea, Rosario Castellanos, José Luis Cuevas, Carlos Monsiváis, Eduardo Lizalde, Víctor Flores Olea, Leonora Carrington, y el poeta Octavio Paz) eran los verdaderos organizadores del movimiento y habían lanzado a los jóvenes a una lucha estéril. El señalamiento le valió el rechazo de la élite cultural e incluso se manifestó que ella era una infiltrada de la CIA. Ante este panorama, debió salir del país y exiliarse en Nueva York y París por más de veinte años.

La joven Elena con su esposo Octavio Paz.
La joven Elena con su esposo Octavio Paz.

Su obra Recuerdos del Porvenir ganó el Premio Xavier Villaurrutia y ha sido considerada un baluarte de las letras nacionales. También escribió las novelas Testimonio sobre Mariana, Reencuentro de personaje, La casa junto al río, Y Matarazo no llamó…, Inés, Un traje rojo para un duelo y Un corazón en un bote de basura.Su obra dramática destaca con Felipe Ángeles, Los perros, La dama Boba, Parada San Ángel, La señora en su balcón, Un hogar sólido, Los pilares de doña Blanca, El rey Mago, Andarse por las ramas, Ventura Allende y El rastro, entre otras.

En cuentos, La culpa es de los tlaxcaltecas, Andamos huyendo Lola y El accidente son muy gustados. Escribió el testimonial Memorias de España 1937, y el reportaje Revolucionarios mexicanos. Apareció póstumamente Mi hermanita Magdalena.

Elena Garro murió un sábado 23 de agosto de 1998 en Cuernavaca a los 77 años, le acompañaban su hija y 14 gatos.

Publicado por Wikimexico / Especial para SinEmbargo

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas